David es mi marido, el padre de las dos fierecillas. No es del Ventorrillo, ni de Coruña, ni de Galicia (bueno, desde hace 10 años sí, mal que le pese). Es extremeño. Concretamente nació en un pueblecito de Cáceres llamado Hervás, donde se conserva uno de los barrios judíos más importantes de España. En Hervás también podemos encontrar uno de los museos de moto clásica más grande de Europa. Son 8 pabellones con más de 300 ejemplares. Para los moteros es, por así decirlo, una parada obligatoria.
Si algo me gustaría destacar de Hervás es lo verde que es, su gran bosque de castaños, sus ríos, sus paisajes... es como un oasis en mitad del desierto. Por eso le llaman el "jardín de Extremadura". Está situado en el valle del Ambroz, al lado del Valle del Jerte, tan conocido por sus cerezas... Aunque en Hervás también las hay y muy buenas, por cierto.
3 comentarios:
¿Le gustan las motos a tu marido? yo soy un gran aficionado. siempre he tenido moto, pero al nacer Martín la vendí por el miedo a que pudiera pasar algo. En fin, el mono no se me ha quitado, así que en cualquier momento me compro otra::))
Lo mio eran las deportivas, pero la próxima seguro que será una rutera o un trike(esto es un secreto, pero a lo mejor en breve cae eso)
En un email te enviaré un enlace de lo que me gustaría comprar para mí y mis otras dos M,s.
No, a David no le tiran las motos y a mi mucho menos... me dan pánico!! je je je
Pero tengo unos primos (uno de ellos es el padrino de Laura) que son fanáticos...no podrían vivir sin ellas.
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