¡Como me gusta el último jueves del mes de Abril! Pero más, más, el primero de mayo.
Por fin ha llegado el más que deseado horario de verano, ¡todas las tardes libres! Todas, todas para mi, y para quien yo quiera compartirla, claro. Y ya sé que no me puedo quejar porque el horario de invierno sólo supone trabajar las tardes de los jueves, pero es que se hacen tan largos, tanto tanto...
Estoy feliz como una perdiz, no me hacen falta ni príncipes ni fortunas, más tiempo es justo lo que yo necesitaba. Tiempo, por ejemplo, para leer. Y ¿qué leer? Pues "La Dama de Nadie", un futuro best seller que nadie se podrá perder. Ir espabilando si no queréis ser los últimos.
Lo que sí, me ha empezado un dolor horrible de garganta. ¿Vosotros no habréis tenido nada que ver, no? Es que la envidia es tan corrosiva...... ñe ñe ñe