Hoy estoy que me caigo. De sueño, se entiende. ZZZZZzzzzz
Mi reino por una cama, por un buen nórdico con un buen plumón y por una almohada viscoelástica (lo del aloe vera lo perdono). ZZZZZZZZzzzzz
Cualquier día, en mi casa, voy a cometer un asesinato, con alevosía, premeditación, ensañamiento…Todo lo que tenga que hacer para que me deje dormir en paz el que conmigo comparte cama.
Que una criaturita no te deje dormir porque se encuentre mal tiene un pase, pero que la criaturita en cuestión, tenga más de 20 años en cada pata, eso es lo que no se puede aguantar. A ver…. ¿para qué se crearon los sofás con orejeras? Para echar cabezaditas, ¿no? Pues eso, entre que te levantas, le das una vuelta al pasillo, te acuestas, te vuelves a levantar y vas al baño, te vuelves a acostar, te vuelves a levantar, vas a la cocina, te vuelves a acostar….y todo ello con una frecuencia de cada 5 minutos y acompañado de una tos de caballo percherón viejo, digo yo que en algún momento la cabeza de uno puede ver más allá de la punta de sus pies y ver que en esta casa también tenemos sala y un sofá. También podría ver que hay rellano, más allá de la puerta, pero eso ya sería mucho ver, ¿no?
Hoy estoy cansada, cabreada y con instintos asesinos. Un largo día me espera, de la ceca para la meca y con sueño. Pe-li-gro-so.
De momento, para contenerme, me voy a recetar una buena dosis de cafeína…Por cierto, ¿el cola-cao es cafeinado?